"El buen montañero madruga mucho sin pesarle para aprovechar el día desde sus primeros rayos, y diseña las rutas para que le sobre hora y media o dos horas de luz como mínimo" (Manual del buen motañero)
Jejejejejejeje... Me he dado cuenta que con la edad si que me pesa madrugar, no hay manera de despegar la cabeza de la almohada. Y es cierto que planifico las rutas con dos horas de sobra, para que nos de tiempo a tomar la cervecita merecida.
¿Quién soy?
Soy una viajera más en este mundo, me gusta caminar por las montañas y los bosques, disfrutar cada momento que paso en la naturaleza para después escribir sobre aquellas cosas que veo, que siento y que me sorprenden.
Vivo cerca del mar y desde mi balcón puedo ver la luna pasear por el cielo nocturno.
A veces, en silencio enciendo velas e inciensos y susurro mis peticiones a la espera de que las hadas las hagan cumplir.
Piedra y sombras, luz y cielo, hermosa cumbre que te alzas alejándote del suelo, sueñas con ser estrella señalando con el pico el lugar en que te ves en la bóveda del cielo. Altiva y fría, poderosa y hermosa, dejas atrás a los débiles y sólo los más valientes se atreven a conquistar tus caras. Tus hermanas te acompañan a través del tiempo y juntas formáis una familia de gigantes, cuyos amigos son el viento y la nieve, las nubes y la lluvia.
1 comentario:
Si a la llegada me espera eso, yo me apunto a las caminatas que hagan falta.
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