En estas fechas veraniegas tiene lugar un evento astronómico llamado lluvia de meteoros de las Perséidas o Lágrimas de San Lorenzo. Ocasión estupenda para reunirnos en un lugar alejado de la contaminación lumínica de las ciudades y poder contemplar el cielo nocturno y sus espectáculos mágicos.
Elegimos este año el mirador del Embalse de la Encantada, construcción casi faraónica que se encuentra por encima del Embalse del Conde de Guadalhorce en Málaga. Lugar que por encontrarse en alto y bien despejado de árboles nos serviría como observatorio.
Pero antes, para esperar la noche, decidimos realizar una ruta corta para ver las ruinas históricos de Bobastro.
Así nos dimos un paseo por los alrededores y disfrutamos de un bonito atardecer con una buena temperatura.
Devuelta hacia el Mirador del Embalse de la Encantada, se nos fue echando la noche encima, la luna que está en fase creciente se mostraba débil y el lucero del atardecer la acompañaba en su descenso por el horizonte.
Después de la cena y ya totalmente a oscuras, buscamos la posición más cómoda para poder contemplar la bóveda celeste, buscar las constelaciones y dedicarnos a la observación de las estrellas fugaces.
Información sobre las Perséidas:
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